El título es un guiño a los nostálogicos que añoramos a Django Reinhardt y su Quintette du Hot Club de France. Solo por eso merece una escucha. Pero el guitarrista italiano Filippo Dall'Asta va más allá porque da una nueva dimensión al Gypsy Jazz fusionando otras culturas musicales (rock, pop, folk...) para que suenen con la estética del swing gitano. Estas atrevidas fusiones y un potente sonido hacen que este disco no deje indiferente al oyente.
Filippo Dall'Asta es un músico italiano nacido en Parma, donde comenzó a tocar la guitarra a los 5 años, para después estudiar en Alemania, Francia, Holanda y la India, de donde se trajo ideas para su primer álbum, Mediterasian, donde hacía Gypsy jazz con influencias de música hindú. En 2022 toma la decisión de trasladarse a Tenerife, lo que explica el carácter aventurero del álbum y su título. Grabado en los Estudios Manzana, de San Cristobal de La Laguna, el lanzamiento de The Hot Club of Tenerife no hace sino recordarnos que Las Islas Canarias vuelven a ser foco de inspiración para el gypsy jazz, como ya escuchábamos hace unos meses en el disco de Marion & Sobo Band inspirado en la isla de la Gomera. Naturaleza, aire cálido y mar; inspiraciones para un estilo tan salvaje y placentero como el de Dall'Asta.
El guitarrista está rodeado en este disco por una potente banda formada por Kepa Martínez tocando el clarinete, Yeray Herrera a la guitarra rítmica, Agustín Buenafuente al contrabajo y Fernando Angulo en la batería. A ellos se suma un cuarteto de cuerdas en uno de los temas. La sincera interpretación de la guitarra de Dall’Asta y la fluidez melódica y festiva del clarinete ("After You've Gone"), nostálgica en temas más lentos ("Not Yet, Sofia!"), mantienen el foco en todo momento. Los punteos de Dall'Asta tienen esa síncopa del buen swing y juego con los cambios de armonía de una manera sutil y juguetona.
En cuanto al repertorio, encontramos sorpresas y más sorpresas. El toque pop de "Lonely" (una versión del "Mr. Lonely" de Bobby Vinton cantada en español con un aire naif y pegadizo) es el vehículo perfecto para un solo breve pero bellísimo de guitarra. Más canalla es la versión de "Cherokee", donde trae el bebop a su propio terreno con virtuosismo y un ritmo endiablado. El clásico "The Man I Love" de Gershwin suena aquí a un tempo más rápido que el habitual y eso le confiere un aire aun más melancólico. El enfoque de la melodía en los dedos de Dall'Asta y el solo de contrabajo aumentan esta sensación. A un ritmo alto suena también "Softly As In A Morning Sunrise", lleno de buenos momentos individuales y con un guiño a Nirvana en la coda...
Pero también hay cinco temas originales escritos por Dall'Asta en los que da rienda suelta a su virtuosismo con ritmos acelerados ("Mona Lee") y a su expresividad en melodías inspiradas o en baladas que son como nanas, como esa dulce "Nico's Dream", que comienza con la vieja melodía francesa atribuida a Mozart "Twinkle Twinkle" (la que en España llamamos "Campanitas del lugar").
Filippo Dall'Asta presenta en este álbum un sonido homogéneo dentro de un repertorio variado y entretenido, lleno de sorpresas y momentos musicalmente originales, una saludable perspectiva contemporánea para disfrutar de este estilo que ya es centenario, el Gypsy jazz. Muy recomendable.
* Web: filippodallasta.com