EL NOVENO ESCALÓN

ARBENZ x KRIJGER x OSBY, Conversation #9: Targeted
(Hammer Recordings, 2023)

El baterista suizo Florian Arbenz, al que pudimos escuchar el año pasado en el deslumbrante trío Vein, viene acompañado en su último proyecto por el saxofonista Greg Osby. No es casualidad. Han trabajado juntos y, a la hora de buscar trasgresión, Osby es perfecto: ha hecho del funk un elemento de ruptura y Arbenz intenta romper moldes en cada álbum de un ambicioso proyecto que va ya por el noveno álbum (este Conversation #9: Targeted), en el que ha cambiado drásticamente de ensemble en cada grabación. Si en la anterior (Conversation #8: Ablaze) reunía a músicos tan distintos como Jorge Vistel o Wolfgang Puschnig (miembro fundador de Vienna Art Orchestra) para dar una vuelta de tuerca a la música callejera de Nueva Orleáns, en este volumen número 9 construye un trío con Osby y con el organista de Hammond Arno Krijger para dar una vuelta de tuerca a un formato de trío de Hammond que no es nuevo pero que nunca había sonado así. 

Desde el primer tema se nota la tensión creada por la percusión, una fuerza que arrastra al resto de los músicos a improvisar sin un final a la vista, convirtiendo (casi) al órgano en un instrumento de jazz rock. El segundo de los temas ("Sleeping Mountain") es, por el contrario un tema especulativo, abstracto, que sirve para que Osby, paradójicanente, busque la melodía con su saxo en una larga improvisación. "Vertikal Hold" es, en cambio, un tema donde escuchamos a batería y saxo improvisando en un diálogo imposible. "Seven Steps To Heaven" vuelve a ese groove con el que la batería fuerza a sus cómplices a virtuosismo más original, reinterpretando a Miles Davis con un color que él nunca hubiera ideado. "I Love You Porgy" nos devuelve a esa parte del Universo Arbenz donde lo etéreo expresa la ruptura con el standard original. El Hammond se muestra sutil, inmóvil como un paisaje sonoro onírico. El saxo es lírico, impresionista, casi puntillista. Mientras que la batería se limita a poner ese punto de brillo en los efectos para redondear la imagen. El ritmo sincopado y cambiante de "Old Shaman" cierra el álbum creando un tema para que los solistas  expresen lo que les quede por decir. Es el último disparo. Y no falla.

El álbum (y esta alianza americano-neerlandesa-suiza) tiene esta heterogeneidad, fruto de la profusión de ideas. Supongo que, cuando un músico es tan inquieto como Arbenz, buscando un nuevo lenguaje en cada disco, lo que halla es un planeta nuevo por explorar. No debe haber nada más excitante, salvo ponerlo en marcha. Y eso es Targeted




* Más info: florianarbenz.com

SINERGIAS

FLAVIO LI VIGNI, XOSÉ MIGUÉLEZ, CÉSAR LATORRE, HORACIO GARCÍA, Nostos (2023)

Este es uno de esos cuartetos prodigiosos que el aficionado escucha y se pregunta qué fuerzas sobrenaturales se habrán conjurado para unirlos. Aunque, normalmente, solo es una cuestión terrenal, de sinergias y personalidades afines que dan (porque el jazz consiste en eso, en comunicación y sinergias) todo lo que tienen para crear un disco perfecto. Los cuatro en cuestión son el pianista César Latorre, el saxofonista Xosé Miguélez, el bajista Horacio García y el baterista Flavio Li Vigni, No hemos escuchado aún el disco perfecto, pero este Nostos se le parece mucho: está lleno de sensibilidad, ritmos placenteros, arreglos que transmiten, energía bien conducida... 

Si uno sigue a Xosé Miguélez en los últimos años se encuentra a un saxofonista y compositor tan prolífico como inspirado. A este álbum llega después de publicar dos álbumes casi consecutivos: Ontology (2019) y Contradictio (2022), ambos para el sello Origin, y de participar en proyectos tan radicalmente alejados como la Orquestra Galega de Liberación. Su fraseo elocuente pero preciso es su mejor arma. Al pianista César Latorre no le habíamos escuchado antes y su virtuosismo y su capacidad para desarrollar los solos nos ha hipnotizado, al igual que la sección rítmica, donde bajo y batería suenan como una maquinaria suiza. Horacio García (Jazzúcar, Jorge Vistel, Iago Fernández) tiene, además, varios solos donde muestra que su contrabajo puede hablar con delicadeza. El de "Two Friends" que es para escucharlo dos veces seguidas. Flavio Li Vigni, por su parte, es de esos baterías inquietos que añaden extras en cada compás. Es responsable del departamento de jazz del Morley College de Londres cuando no toca con propio su trío o cuarteto.


La estética predominante en Nostos es la de un jazz moderno que mira a la tradición, un jazz atemporal, complejo pero fácil de escuchar. Hay algún momento más libre, que rompe los esquemas del álbum y que permite escuchar el lado más atonal del cuarteto ("Her Triumph") y una versión: "Someday My Monk Will Come", donde retoman el clásico de Disney que enamoró a Miles y lo pasan por los esquemas rítmicos de Monk. Una joya. 

También hay momentos más líricos. Quizás el momento más perfecto del álbum sea la versión de "Contradictio", donde todos suenan con un sentimiento soberbio. "Nostos", la balada que da título al álbum, por su parte, tiene esos fraseos de tenor que hacen inolvidable una melodía y un solo de piano efusivo, lleno de nostalgias, aupado por una sección rítmica perfecta. El título hace referencia a una antigua palabra griega que viene a significar "regreso a casa". 




* Web de Xosé Miguélez: xosemiguelez.com

MODERN MINGUS

IOSU IZAGUIRRE SEXTET, Mingus Moods
(Errabal Jazz, 2023)

Mingus era un músico tan sensible como salvaje. Nadie puede negarlo. Su jazz estaba lleno de rabia tanto como de intenciones. A día de hoy ha sido versionado hasta la saciedad, pero pocas veces reinterpretado. El disco que hoy estamos escuchando, liderado por el bajista Iosu Izaguirre, le rinde homenaje de una manera particular: en este álbum no hay temas de Mingus sino composiciones originales inspiradas en su filosofía jazzística y amparadas en un sexteto potente, donde brillan los espléndidos solos de Koldo Uriarte al piano (espléndido solo también el de Asier Iturbe al trombón en "Mingus Moods", el tema que abre el disco) y una sección de viento (Rubén Salvador a la trompeta, Pablo Ramos al saxo alto y el citado Asier Iturbe al trombón) que homenajea a aquella época en que los escenarios de jazz no eran íntimos ni intelectuales sino poderosos focos de energía. Pero lo más interesante de este planteamiento es que, sin perder la esencia marca Mingus, los arreglos y la ejecución suenan modernos, brillantes. El sexteto se completa con Aitor Bravo a la batería, mientras que Izaguirre se reserva el papel de Mingus: contrabajo, composición y motor de la banda. 

Iosu Izaguirre
En el conmovedor texto que incluye el libreto del disco, David Gotxikoa recuerda que en la música de Mingus convivían "en tensión conceptos y emociones en apariencia antagónicos: rabia y ternura, vanguardia y primitivismo, orden y caos, humor y conflicto". Iosu Izaguirre comenzó a tocar el bajo de adolescente en bandas de rock y ska, donde quizás nació parte de su energía, para luego especializarse en jazz. Tiene una dilatada carrera como músico pero es su primer álbum como líder, y lo hace con composiciones propias, inspiradas en la estética de Charles Mingus, pero propias. La única versión del álbum responde a esa rabia heredada del rock: una versión de "Tiempos nuevos, tiempos salvajes" del grupo Ilegales, una versión que aquí alterna un lirismo nostálgico con momentos de fuerza. 

Foto: Joseba Baleztena

Al estilo de Mingus, Izaguirre ha escrito falsas baladas llenas de disonancias y arritmias como "A los que se fueron" (donde se mueve hacia el blues sin despeinarse) o "Landalan" (donde el grupo explora sensaciones extrañas para explotar en puro hardbop). Hay muy buenos temas en el álbum, pero me gustaría destacar "Ez pentsatu gehiegi", donde Izaguirre se da el lujazo de comenzar el tema con un sentido y melancólico solo de contrabajo que no es sino un esbozo de lo que viene: entra a saco en una montaña rusa bordeando el post-bop que Mingus inauguró como expresión personal y que cambió el rumbo del jazz. 

Para terminar, suena un tema de aire tropical llamado "Piscola" que redondea un disco original de un compositor original y que respeta la tradición, un músico que, sin versionar, devuelve a Mingus una modernidad que merece.



* Más info: www.hotsak.com/artistas/iosu-izaguirre-sextet-1

TRES MANERAS DE EXPRESAR SERENIDAD

Después de escuchar la explosiva propuesta de The Acrylic Rib, el cuerpo pedía calma. Pero no se puede pasar del free a escuchar baladas de Billie Holiday. Por suerte, buscando entre las novedades de esta primavera, han aparecido tres discos que buscan romper sin subir la voz, tres maneras de expresar serenidad, calma, quizás paz. Hoy escucharemos a Kasper Tranberg, Cecilie Strange y el trío de Richard Andersson NOR


RICHARD ANDERSSON NOR feat. HILMAN JENSSON,
Undo (Hobby Horse, 2023)

El  tercer   álbum   del   trío
Richard Andersson NOR comienza precisamente con un tema titulado "Serenity". Liderado por el contrabajista danés Richard Andersson, este trío islandés, como él lo denomina, está formado por el saxofonista Óskar  Guðjónsson y el baterista Mattias Hemstock. En este álbum colabora también el guitarrista Hilmar Jensson, que aporta una dosis de lirismo al estilo de Bill Frisell. 

Richard Andersson está considerado un músico imprescindible en la escena danesa del jazz contemporáneo. Ha obtenido premios y menciones de The NYC Record, AllAboutJazz y The International Bassconvention. Ha tocado con figuras enormes como Jerry Bergonzi, Jorge Rossy, Jeff "Tain" Watts y Kasper Tranberg (de quien hablamos más abajo). En este tercer disco de su trío NOR, nos ofrece un repertorio uniforme pero de compositores distintos (dos temas suyos, dos de 
Guðjónsson, dos de Jensson y uno de Anne Efternøler), lo que no impide que haya una heterogeneidad plausible en el desarrollo del álbum, siempre hablando lo que él llama "lenguaje nórdico".


Aparte de "Serenity", habría que destacar el intenso "Helmingur Búinn", donde el saxo toma protagonismo aportando una atmósfera opresiva que crea una tensión inesperada en el oyente hasta el misterioso desenlace. Más lírico, Guðjónsson lleva la melodía en "Langsom", un tema lacónico, lejano, donde el contrabajo es el encargado de poner el contrapunto dramático (junto con la guitarra) a un paisaje onírico, emocional, que nos hace olvidar que estamos ante una complejidad tonal que el grupo usa de manera muy inteligente.

Un disco perfecto para conocer a este trío nórdico. Recomendable.






CECILIE STRANGE, Beyond (April Records, 2023)

¿Qué hay más calmado que una nana? El álbum de Cecilie Strange es uno de los pocos que han conseguido conmoverme recientemente, no solo por su estilo sino también por su intención: sus temas llenos de paz, bellísimos, entroncados en los poéticos fraseos de su tenor, intentan expresar la paz y la serena grandeza de ser madre. No es algo habitual en el jazz, donde la rebeldía es una bandera común, pero quizás en esta época de egocentrismos, redes sociales, relaciones virtuales, abortos a la carta y guerras cotidianas, ser madre (o simplemente amar) se pueda considerar una forma de rebeldía


Este es el tercer álbum de Cecilie Strange en April Records después de Blue (2020) y Blikan (2021). Su cuarteto se completa con Peter Rosendal al piano, Thommy Andersson al bajo y Jakob Høyer en la batería. A la ternura de los temas se une la melancolía (sentimiento muy próximo a la felicidad, que nos recuerda a los que ya no están, otro leitmotiv del álbum). El disco comienza con una melodía con un ritmo tan pausado como complicado de seguir para un saxofonista. Es un nostálgico tema dedicado a su abuela. Le sigue una nana ("Byssan Lull") que suele cantar a sus hijos y que, a su vez, es heredada de la anterior generación...

La compenetración entre los cuatro músicos favorece esta interpretación calmada de lo que es el jazz contemporáneo: lírismo, emoción contenida, inspiración, sutileza, intelectualidad... Todo el álbum parece estar tocado en voz baja, como haría una madre para no despertar a su hijo. Las melodías son como pensamientos íntimos. Los lentos fraseos del saxo reflexionan y el resto de los músicos está a su servicio, incluso cuando calla y encontramos el valor en esos silencios (como en "Midnight Sun Upon Saltværsøya", donde hay un delicado y sutil diálogo entre bajo y piano). 

Siempre he pensado que todas las formas de creatividad están conectadas y se nutren unas de otras, y el planteamiento de este Beyond de Cecilie Strange conecta esas dos formas de creatividad tan supremas como son la música y la vida. 




KASPER TRANBERG, Nobody's Heart (April Records, 2023)

La paz que nos trae el trompetista danés Kasper Tranberg es una paz inusual. Raramente se encuentra un disco de jazz calmado, pausado, reflexivo, de un trompetista. Sí, claro, están aquellos discos de Miles y su sordina... Pero desde Miles y Chet ha habido poca originalidad y mucha caña. La trompeta es un animal difícil de domesticar, y exige fuegos artificiales. Lo que nos trae Kasper Tranberg, músico que lleva subido a la escena de la improvisación desde los 90, es un disco moderno donde la reflexión y el gusto por el sonido templado (pero emocional) de su trompeta es una seña de identidad.

Foto : Mike Højgaard/neue.pink

En Tranberg hay un deseo constante de marcar distancias. Su sección rítmica, con la que ha tocado desde los '90 (Nils Davidsen al bajo y Frands Rifbjerg a la batería) se encarga en todo momento de crear paisajes sonoros inusuales, atmósferas oníricas o simplemente inclasificables. Ritmos lentos siempre (salvo quizás en "Circle Dance", tampoco mucho) que se detienen y cambian, siempre cambian, provocando desconcierto en el oyente y un campo perfecto para los fraseos especulativos de Tranberg. 

No es free jazz. ¿Improvisación? Algunos amantes de la improvisación libre dirán que estamos ante un disco aburrido, pero los recursos que Tranberg y su trío van desplegando a lo largo del disco convierten la escucha en algo muy distinto. Para empezar, no es un trío habitual: trompeta, bajo y batería se convierten en algún momento en trompeta, chelo y batería ("Ukendt/Bitter Funeral Beer"). 

Un álbum de texturas, exploración e introspección en el que se mira a sí mismo a través de sus encuentros musicales de las últimas tres décadas: todos los temas son versiones, en las que hace suyos a Masabumi Kibuchi, Ornette Coleman, Rodgers & Hart, Paul Motian, C.V. Jergensen... para encontrarse a sí mismo. El resultado es un disco calmado, pacífico en su forma, impredecible.



* Más info: kaspertranberg.com

DE LA EXPLOSIÓN A LA LÍRICA ATONAL

THE ACRYLIC RIB,  As Far As November (FSR, 2023)

Reencontrarse con la creatividad de Albert Cirera es algo que siempre se agradece. En este nuevo trío en el que participa (The Acrylic Rib) forma equipo con el contrabajista Olie Brice y el percusionista Nicolas Field, una formación clásica que intenta derrumbar los pocos estereotipos que quedan en pie del free jazz. Power trío donde los haya, su energía golpea al oyente desde el primer momento. Es su primer disco juntos pero ya han tocado en Ginebra, Barcelona, Portugal... para conseguir llegar al estudio de grabación en noviembre de 2021 (en el estudio AMR de Ginebra) y conseguir que su trabajo vea la luz, por fin, esta primavera en el sello Fundacja Słuchaj!

Rociado el escenario con gasolina, solo es preciso que uno de los tres encienda el sonido para que todo salte por los aires. Ese momento fugaz, que apenas dura lo que tarda en emitirse una nota en el saxo, en poner a vibrar una cuerda del contrabajo, en golpear un parche de la batería, se extiende durante una hora de reloj. No se equivoquen, todo lo que parece discurrir durante ese tiempo está en realidad contenido en un solo instante. Es un big bang de energía musical que se expande pero que, en origen, es solo eso: una explosión, un resplandor fugaz, un átomo que contiene todas las posibilidades.

Así comienzan las notas del álbum (el texto es de Carlos Pérez Cruz, de Club de Jazz), dejando clara la filosofía del trío. Y entonces suena, contundente, el primer tema, como una revolución violenta (todas las revoluciones son violentas y casi todas tienen líderes cómodamente sentados en despachos, pero estos tres son guerrilleros) en la que todo explota. Su título es casi punk ("A Zipper Hidden in the Arm") y uno siente que puede pasar cualquier cosa.




El segundo y último tema (sí, solo hay dos temas pero de media hora cada uno) tiene un título más divertido y sarcástico ("By The Time You Finish Reading This It Will Be Over"). Ambos cortes están estructurados como suites (suites improvisadas pero con el mismo efecto dramático) en las que los tres músicos emprenden una aventura que se convierte en carrera (virtuosismo, contundencia, vértigo) o en tregua (lírica atonal, paz en la disonancia, especulación, búsqueda), invitando al aficionado a un viaje tan poco usual como gratificante. Eso sí, absténganse puristas.



¡MUSICALES, MUSICALES, MUSICALES!

JOHN PIZZARELLI, Stage & Screen (Palmetto, 2023)

Todo el mundo sabe que los musicales están de moda. Cada vez más. Madrid, sin ir más lejos, es la tercera ciudad (después de Nueva York y Londres) con más producciones en cartel y más espectadores. Pero si hay un lugar donde nunca han pasado de moda los musicales es en el jazz: hay tantos standards que fueron, en su nacimiento, números de Broadway que la lista sería inacabable. "My Favourite Things" (de Sonrisas y lágrimas) sería el ejemplo perfecto. Quizás se haya interpretado más en clubs de jazz que en teatros. Pero también están otros temas cuyos musicales se han olvidado y han sobrevivido en la voz de músicos de jazz: "Night and Day" (La alegre divorciada), "Easy To Love" (Born to dance), "Just One of Those Things" (Jubilee), "If I Were A Bell" (del musical Guys and Dolls), "New York, New York" (Un día en Nueva York)... La lista sería interminable.

Y el cantante y guitarrista John Pizzarelli parece empeñado en hacerla más larga con su nuevo disco, donde repasa y hace suyos, con su personal y espectacular estilo, 12 standards sacados de otros tantos musicales (y alguna película). Estos doce temazos conforman un curioso e interesante repertorio donde encontramos a un músico no solo en plena forma a sus 63 años sino en estado de gracia, que aporta a casi todos los temas una sobrecarga de energía marca Pizzarelli que no poseían en su versión original, pero ¿quién no prefiere una versión personal a una original? El resultado es fantástico en tanto que aporta su peculiar personalidad a estos temas, tanto en la guitarra (algunos son pura diversión) como cantando... o haciendo las dos cosas a la vez, en uno de esos solos en los que cantan al unísono Pizzarelli y su guitarra (espectacular en el tema final, "Coffee In A Cupboard Cup"), uno de los detalles que más nos gusta de él.
“La idea de sacar estas canciones del contexto de sus musicales o de sus películas me parecía interesante", afirma Pizzarelli. "Con un nuevo arreglo puedes cambiar el significado de una canción. Eso es lo que hemos estado haciendo toda nuestra vida como músicos de jazz, intentar descubrir cómo hacer estas canciones diferentes, ya sea un estándar o un éxito de los Beatles. Y siempre es divertido."

El disco comienza arrollador, con una guitarra vertiginosa, en "Too Close For Comfort" y va recorriendo sin concesión a la pausa temazos como "I Love Betsy" (de la película y luego musical Honeymoon in Vegas), que sería un perfecto exponente de cómo letra y música, mensaje y forma, aportan espectáculo en Broadway. No faltan esos solos voz/guitarra al unísono, ni otros temas que hemos escuchado en escenarios de jazz y provienen del teatro musical, como "Tea For Two" (una de las pocas baladas del álbum), "Some Other Time" o "Time After Time" (que, indefectiblemente, nos trae a la memoria a Miles Davis) del musical It Happened In Brooklyn, que protagonizó Frank Sinatra. 

Un disco al más puro estilo Pizzarelli, perfecto para celebrar el 40º aniversario de su debut discográfico con aquel I'm Hip (Please Don't Tell My Father de 1983) y para entrar en su universo (o en el de los musicales) si aún no lo conoces.





* Web de John Pizarelli: www.johnpizzarelli.com

EL PLACER ES MUTUO

DAVID REGUEIRO TRIO feat. ALEXANDRE CAVALIERE,
Perfect Match (2023)

El guitarrista gallego David Regueiro es de esos músicos incombustibles que parecen estar siempre ahí, al pie del cañón, y suponemos que esto se debe a que, aunque virtuosismo y cultura musical no le faltan, lo que busca en sus discos es divertirse y hacer que el público se divierta. Todo comienza en el título, un juego de palabras donde se puede entender Perfect Match como "la combinación perfecta" (los cuatro músicos funcionan como un reloj suizo) o como "la cerilla perfecta" (guiño en la ilustración del booklet) entendiendo que match significa también "cerilla" y que aquí parece bastar una chispa para crear música. Con su trío (dos guitarras y bajo) o con ese Swingtet con el que se atrevió a versionar a Charlie Parker, su música destila tanta calidad como placer. Imposible no disfrutarla. Y si él se divierte, el placer es mutuo. 

Antes de convertirse en un referente de la guitarra manouche en España, David Regueiro cursó estudios de Guitarra, Educación Musical, Historia y Ciencias de la Música en diferentes conservatorios (Ourense, Salamanca y La Coruña) y universidades (Complutense de Madrid, Salamanca y Royal Holloway de Londres), siendo alumno de, entre otros, Samson Schmitt, Brady Winterstein, Mozes Rosenberg, Adrien Moignard, Joaquín Chacón, Abe Rábade, Paco Charlin, Albert Sanz, Peter Bernstein... Ha grabado 15 discos, como líder o como acompañante, entre los que destacaría su personal Areal del año 2020.


Perfect Match es una colección de temas originales, compuestos y arreglados por Regueiro, donde expresa su pasión por el gypsy jazz y sus posibilidades. Viene respaldado por su trío (Gonçalo Mendonça en la guitarra rítmica y Juyma Estévez al contrabajo) y por Alexandre Cavaliere, un invitado de lujo y un referente del violín en el jazz manouche. 

Juntos, los cuatro despliegan todas esas posibilidades del gypsy jazz de las que hablábamos: ritmo contagioso ("Octopus Blues"),  humor ("Tone It Down, Turn It Up!"), armonías, contrapuntos, swing y nostalgia, mucha nostalgia, como en el maravilloso "The Seagull and the Frog" o el conmovedor bolero a ritmo de swing titulado precisamente "Bolero desesperado". En resumen, un disco muy completo, donde el oyente con inquietud encontrará mucho más que solo ritmo y donde cada momento y cada arreglo cuenta. Recomendable. 




* Más info: davidregueiro.gal

VOCES EN LA CAVA

ORIOL ROCA TRÍO & LYNN CASSIERS, Live at Jazz Cava
(Underpool, 2023)

Este disco se grabó dentro del 24º Festival de Jazz de Vic, en Jazz Cava, local que da nombre al álbum. La noción de directo imprime una calificación mayor al proyecto, dada la dificultad que supone su estilo ajeno a los cánones, su heterogeneidad, sus cambios de ritmo y de tono dentro de cada tema... El proyecto, firmado por el percusionista Oriol Roca y la cantante y teclista Lynn Cassiers, nos deja una grabación única (y seguramente irrepetible), que va más allá de la improvisación, creando paisajes sonoros que sobrevuelan territorios como el jazz-rock, el prog-rock, el free jazz o la música experimental contemporánea.

Oriol Roca es un baterista catalán al que ya habíamos escuchado en otras grabaciones del sello Underpool (como el cuarteto de Iago Aguado). Formado en los Países Bajos, lleva tras de sí una carrera de más de 20 años en los escenarios en diferentes proyectos (Tàlveg, Mut Trío, David Mengual...). Este es su segundo álbum como líder, y viene acompañado por dos compañeros habituales: el pianista Giovanni di Domenico y el contrabajista Manolo Cabras, además de Lynn Cassiers, que se une con naturalidad al trío aportando su voz y sus teclados electrónicos. Esta cantante belga, que también estudió en el conservatorio de La Haya, ha participado en numerosos proyectos grupales (Octurn, The Brussels Jazz Orchestra, Tape Cuts Tape, Flying Nimbus...) convirtiéndose en una figura importante de la música contemporánea y de la improvisación en la escena europea. 


Alejándose en todo momentos de los esquemas clásicos del jazz (salvo en algún solo de Domenico), el repertorio del álbum cede todo el terreno a la improvisación y a las sensaciones producidas por las atmósferas creadas por la voz y la electrónica de Cassiers, a la que se subyuga la sección rítmica. Esto no es óbice para que la emoción surja en los momentos oportunos, especialmente en pasajes de gran intensidad ("Low") o de un inesperado dramatismo ("The Mutilated"). En resumen, el concierto es una sutil performance, donde el jazz justifica la improvisación y las letras y la voz de Cassiers aportan el mensaje. No es un disco para puristas pero sí para aquellos a quienes les guste salirse del camino habitual y gocen con discos únicos.



* Web de Oriol Roca: oriolrocamusic.com

* Web de Lynn Cassiers: lynncassiers.com

* Foto de Oriol Roca: Cedric Craps.

ECOS DE "TUTU"

JASON MILES & KIND OF NEW,
Miles to Miles Live (Ropeadope, 2023)

¿Quién es Jason Miles y por qué Miles Davis dijo que era un genio? Esta frase de la nota de prensa nos deja intrigados y pinchamos el álbum. Su título, Miles to Miles Live da a entender desde la portada que vamos a asistir a una resucitación de la música de Miles Davis. En la biografía escrita por Ian Carr, destaca que Marcus Miller contrató a Jason Miles para el álbum Tutu, con la idea de introducir sintetizadores en el disco. Davis estaba en esa época por la labor de introducir en sus temas todo lo que llegaba a sus oídos y el resultado es conocido. Jason Miles trabajó también en Amandla y continuó desarrollando una carrera cuya síntesis podría estar en este nuevo álbum, un resumen de su sonido desde Tutu hasta su reciente Black Magic (2020). 

La nostalgia está servida, pero juega con ventaja, con el sonido sintético que él mismo creó y con la inestimable colaboración de dos elementos: un gran Barry Danielan a la trompeta, y la sordina Harmon. Hijos musicales de Miles Davis los hay a cientos, de modo que no vamos a comparar a Danielan con el maestro, pero sí añadir que su protagonismo en el álbum es total... si exceptuamos al saxofonista Aaron Heck, brutal en algunos solos ("Street Vibe", por ejemplo). A esto hay que sumarle que el groove potente y diferenciador de Jason Miles a los synths convierte los temas en descargas de energías incontestables. Recalcar que este Live viene del álbum que publicó en 2005 con el título de Miles to Miles y que ahora se presenta en una grabación en vivo donde lo más sorprendente es la versión edulcorada (escuchen solo la trompeta si lo desean) de "Flamenco Sketches" (en la versión en vivo no suena la guitarra española).


Los músicos del álbum son: Jason Miles (sintetizadores, programación y efectos), Aaron Heck (saxos alto y soprano), Barry Danielian (trompeta), Sherrod Barnes (guitarra), James Genus (bajo), Cindy Blackman Santana (batería) y Cyro Baptista (percusión). Miles to Miles Live es un álbum corto en temas pero extenso en referencias y solos, disfrutable cada minuto, un álbum imprescindible para recuperar a una figura como Jason Miles, que fue clave en un momento histórico de Miles Davis, que ha mantenido una carrera estable pero no muy conocida, y que nos ofrece aquí una versión aparentemente nostálgica, con esa mezcla de electrónica y energía acústica, pero nueva. 

Les dejo con unos vídeos anteriores que ilustran el trabajo de Jason Miles con Kind of New.





* Web: www.jasonmilesmusic.com

DIÁLOGOS

KARIN HAMMAR Fab4 invites RITA MARCOTULLI,
Opening (Prophone Records, 2023)

Karin Hammar Fab4 es un cuarteto sueco formado en 2014. Está liderado por Karin Hammar, una trombonista con más de 25 años como líder en otras formaciones, co-liderando The Sliding Hammers (con su hermana Mimmi Hammar) y colaborando con artistas como Gary Burton o Maria Schneider. Los otros miembros del cuarteto son Andreas Hourdakis a la guitarra, Niklas Fernqvist al bajo y Fredrik Rundqvist a la batería. La estética que proponen es la de un jazz contemporáneo, cercano a la música clásica, donde la improvisación fluye con serenidad y con una naturalidad que parece escrita.



En 2020, el cuarteto liderado por la trombonista Karim Hammar invitó a un cuarteto de cuerda para su disco Strings Attached. Para este nuevo álbum, titulado Opening, han vuelto a invitar a un músico externo para extender las fronteras musicales del grupo: la pianista italiana Rita Marcotulli


Marcotulli tiene una dilatada carrera que incluye una docena de discos, además de su participación en giras de músicos enormes (desde Chet Baker hasta Pat Metheny). En cine ha colaborado con Nino Rota y con Ennio Morricone, y es también compositora de bandas sonoras, encajando de manera especial en la peculiar filosofía de Fab4. Reunidos en Estocolmo en abril de 2022, el resultado son estos nueve temas que exploran la relación del jazz con la música narrativa, creadora de atmósferas e historias. 

El fraseo limpio, elegante y casi lírico de Hammar al trombón, sostenido por la sección rítmica, dueña de los tempi con un groove alejado del ruido, y el vocabulario elegante de Hourdakis a la guitarra, son el contrapunto ideal para la dicción sincopada de Marcotulli, que convierte el diálogo cuarteto/pianista en un juego alternante de compenetración y enfrentamiento, de hablar el mismo idioma en algunos momentos y, en otros, de llamada y respuesta. Una delicia de disco para los amantes del jazz contemporáneo y exento de fuegos artificiales.