PINCHA 'MISTY' PARA MÍ

O de cómo Eastwood nos enganchó al jazz

Conociendo a Clint Eastwood, no nos extraña que su primera película como director de tuviera el jazz como leitmotiv. Play Misty For Me se rodó en 1971, el mismo año de Harry el sucio, y cuenta la historia de un disc-jockey de radio con un programa de jazz y de una aficionada obsesionada con un tema de Erroll Garner: Misty.

El título. Choca que en el doblaje español aludan a este tema con el título de Nebuloso (traducción literal de Misty), pero esto duele menos que justificar (o no) que en España se “tradujera” el título de la película como Escalofrío en la noche (en Francia tuvo un título similar) por el hecho de que el programa de radio se emite de madrugada; concretamente, cinco horas de jazz nocturno. Ahí es nada.



La película. Aunque es una precursora reconocible de Atracción fatal (1987) y de otras tantas historias de mujeres alteradas, Play Misty For Me no es una gran película. Acumula clichés de la época, recién consolidada la revolución sexual de los 60, lo cual no impide que el guión nos muestre una anticuada apología del típico protagonista con muchas novias, además de escenas video-clip con paseos por la playa y el campo en plan Robert-Redford-romanticón, pero la película tiene el interés de un oasis entre el duro Eastwood de los westerns y el Eastwood bestial de la serie Harry el sucio, (el director Don Siegel hace un pequeño papel como barman), además del valor de los anecdótico (es su primera cinta como director y su primer acercamiento al jazz en el cine). En su bisoñez de opera prima, se permite momentos documentales como la visita al Festival de Jazz de Monterey, con escenas rodadas en septiembre del 70 en las que podemos ver actuaciones de Johnny Otis, del quinteto de Cannonball Adderley y al teclado un Joe Zawinul que aún no había eclosionado con su gran invento: Weather Report...


Misty. Misty es un estándar. No me extraña. Es un tema que te engancha desde el primer acorde con esa forma tan particular de tocar que tiene Erroll Garner, a medio camino entre el clasicismo de Art Tatum (a quien sustituyó en el trío de Alan Stewart) y la innovación (tocó en sus comienzos con el mismísimo Bird). La revista Down Beat saludó su descubrimiento con el título de “El primer pianista con dos manos desde Fats Waller”. Su forma de prestarnos las notas una a una, sugiriendo en lugar de dibujar, sus repeticiones, sus pausas, sus silencios y sus sucesiones de notas altas, tantas veces imitadas después con dispar resultado, hacen de Misty una balada única. Wyatt Ruther al bajo y Eugene Heard a la batería completan la formación.

Encuentros. Entre las curiosidades de la película hay ciertos paralelismos provocados por Eastwood para el aficionado al jazz. Aparte del programa de radio y los temas que en él se pinchan, tenemos al protagonista de la película, que se llama Garver, casi casi como Erroll. Por otro lado, está el escenario, Carmel-by-the-Sea, ciudad donde vivió el actor/director y de la cual fue elegido alcalde en 1986. Una foto de los arrecifes que rodean su acantilado aparece en la portada del disco de Erroll Garner Concert by the sea (Columbia, 1958), un disco imprescindible, considerado el disco de un pianista de jazz más vendido de la historia.